MARTES 25 DE MAYO DE 2021

Más de Uno Cantabria 25/05/2021

Casi 21.700 cántabros, considerados trabajadores esenciales por debajo de los 60 años, se encuentran a la espera de recibir la segunda dosis de la vacuna contra el virus. Recibieron un primer pinchazo de AstraZeneca. Ahora Sanidad les insta a recibir la segunda dosis de Pfizer o firmar una declaración de consentimiento.

Javier Barbero

Santander | 25.05.2021 14:43

Precisamente, esa declaración de consentimiento, eximiendo a las autoridades sanitarias de cualquier efecto adverso en caso de optar por una nueva dosis de AstraZeneca, ha provocado la incertidumbre entre dichos profesionales. El doctor Marcos López Hoyos, presidente de la Sociedad Española de Inmunología (SEI), jefe del servicio de Inmunología del HUMV y director científico del IDIVAL, sostiene que cualquiera de ambas fórmulas es válida y segura para el paciente. "Ahora bien, no comparto con el Ministerio que haya que firmar una declaración expresa en caso de optar por una segunda dosis diferente a la primera vacuna, cuando debiera ser al revés", sostiene.

Además, preguntamos a algunos de los colectivos profesionales involucrados: policías, bomberos, profesores y farmaceúticos. De una manera mayoritaria, todos prefieren recibir la segunda dosis de AstraZeneca.

En la segunda parte hablamos de Patrimonio municipal. La consulta pública en Santander sobre el Plan General arrojó un consenso tanto de ciudadanos anónimos como de expertos sobre la necesidad de que las Administraciones Públicas preserven el patrimonio de la ciudad. ¿Por qué, por ejemplo, el Edificio de Tabacalera no está protegido? ¿Por qué no se recuperan espacios con tanta historia como el Antiguo trazado del Hipódromo de Bellavista o el Aeródromo de La Albericia, hoy convertido en la Avenida del Deporte. ¿Se puede recuperar esos espacios con tanta historia? ¿Cuál sería la manera de hacerlo? Para responder a estas cuestiones nos visitan Aurelio González de Riancho, miembro del Grupo Alceda, Lydia Quevedo Doctora en Bellas Artes y restauradora y a Eva Guillermina Fernández, Directora de Cultura del Ayuntamiento de Santander.