El hombre de 37 años que sufrió quemaduras graves en las extremidades, en el incendio que tuvo lugar ayer por la mañana en dos habitaciones del Monasterio de Lluc, evoluciona favorablemente de sus heridas y no se teme por su vida, ha informado el Hospital de Son Espases.
El herido, que sufrió quemaduras de segundo grado en el incendio, permanece ingresado en planta con pronóstico moderadamente grave y su evolución es positiva.
Este hombre fue la única persona que resultó herida en el incendio registrado ayer en las habitaciones del Monasterio de Lluc que se originó alrededor de las 8.20 horas de la mañana y que obligó a desalojar la residencia del santuario.