Al detenido se le acusa de un delito de usurpación de estado civil. Explicó a la Policía, que aprovechó que tanto los rasgos físicos como la edad de la persona a la que pertenecía la documentación eran parecidos a los suyos. Entendía que era la manera de acceder a un contrato de trabajo.
Había llegado a Asturias con una cuadrilla de trabajo desplazada desde Portugal para realizar obras en el sector de la construcción.