Los 1.500 vecinos de los ocho municipios desalojados el sábado por el incendio de Añón de Moncayo ya han podido volver a sus casas. El fuego ha afectado a más de 6.000 hectáreas y permanece estabilizado. La UME ya ha retirado sus efectivos, pero permanece en la zona un operativo formado por unas 60 personas que siguen trabajando para conseguir dar por controlado hoy el incendio.
El fuego se originó el sábado y las llamas rozaron el Monasterio de Veruela. Murieron 450 ovejas en Alcalá y otras explotaciones agrícolas, ganaderas o apícolas resultaron afectadas, además de viviendas y naves.