El presidente de la comarca del Jiloca se reunirá antes de que finalice la semana con los responsables de la empresa adjudicataria de la recogida basura para cerrar una mesa de negociación. Los trabajadores llevan en huelga desde el pasado 14 de agosto y en estos momentos los servicios mínimos son del 50%.
Una merma en la prestación del servicio que está empezando a pasar factura, no solo en lo que respecta a la acumulación de residuos mayoritariamente inorgánicos, sino a la dotación de material. Y es que la comarca ya dispone de más de un millar de contenedores nuevos para sustituir a los actuales, que no van a poder colocarse hasta que finalice la huelga porque es necesario que esté toda la plantilla disponible para poder hacer el intercambio.
Desde la comarca confían en poder limar asperezas para cerrar las negociaciones y desconvocar la huelga lo antes posible.