El entrenador del Villarreal, Marcelino García, manifestó en rueda de prensa que ante el partido de semifinales de Copa de ante el Barcelona, que afrontan con la desventaja de 3-1 de la ida, su equipo no va a ir "a tumba abierta".
"Creemos que podemos ganar desde una idea de juego colectivo. No vamos a ir a tumba abierta, porque tenemos experiencias recientes como el City, que nos ayuda a pensar de esa manera, o el Atlético de Madrid, que tenía un resultado similar y en 25 minutos les metió dos y tres goles", recordó Marcelino.
"De todas formas, no vamos a frenar nada, si tienen ímpetu, rienda suelta, no podemos cortar iniciativa, ganas de ganar o ilusión, pero sí debemos tener una mezcla de ganas, ímpetu y concentración. No es todo corazón, también tenemos que ser inteligentes", ha añadido.
En su idea para el partido, Marcelino añadió que sus jugadores intentarán estar "muy ordenados, juntos y solidarios atrás y después ser atrevidos, precisos y rápidos cuando tengamos el balón", aunque ha agregado que conseguir este objetivo "no es fácil". Lo que si que tiene claro Marcelino es que a su equipo no le conviene un partido abierto y con goles. "Si hay muchos goles, estamos jodidos", ha comentado.
"Vamos a jugar a tope, a todo lo que podamos, vamos a dejar todo en el verde, esperemos que nos salga bien", continuó Marcelino, quien ve "un buen estado de ánimo en el grupo", al que percibe "contento e ilusionado" y que aunque saben que es difícil -llegar a la final-, "todos quieren jugar este partido".
Marcelino insistió en que su equipo debe evitar obsesionarse con nada respecto al rival y tratar de iniciar el partido con "ánimo de ganarlo, trabajar cada balón con intensidad y concentración". "Tenemos que estar muy metidos y concentrados de lo que ocurre en cada momento", agregó.
Para ganar a un grande Marcelino asegura que se debe "tener un muy buen día y que ellos que no lo tengan, aunque una cosa ayuda a la otra", así como una suma de "suerte y acierto en momentos puntuales". En ese sentido, Marcelino ha apuntado que a pesar de que en el partido de ida el Barcelona no les generó más ocasiones que el Real Madrid el pasado domingo en Liga, el conjunto barcelonista les marcó tres goles.
Para el entrenador del Villarreal llegar a la final sería "lo más bonito que nos ha pasado en el mundo del fútbol", ya que es "un sueño que todos pensamos alguna vez". "El destino está escrito y creo en él, tenemos que intentar poner todo de nuestro lado a través del esfuerzo. La lógica en el fútbol a veces no existe y pienso que ese destino puede ocurrir. No solo sería una satisfacción para nosotros, sino para la gente del club que quedó en puertas como el presi, pero reconozco que es muy difícil", manifestó.
A la afición le pidió que les ayude desde el minuto 1 hasta el 90, "para meter un gol si puede y disfrutar 90 minutos porque es el momento de eso", ha finalizado.