El equipo de la ciudad portuaria de Santos admitió en un comunicado que le pidió a la FIFA en mayo pasado un arbitraje para determinar posibles violaciones contractuales en la transferencia de Neymar al Barcelona, pero negó que hubiese incluido en su petición una solicitud de sanción.
"El Santos FC no presentó ninguna petición adicional a la FIFA, por lo que tan sólo está en curso el procedimiento arbitral tal y como fue propuesto inicialmente", informó el club en un comunicado ante versiones de prensa según las cuales exigió que Neymar sea sancionado con la suspensión.
De acuerdo con el portal brasileño Globoesporte, el presidente del Santos, Modesto Roma, le pidió a la FIFA la inhabilitación de Neymar en una demanda en la que le acusa de infringir el artículo 62 del Código Disciplinario de la federación internacional.
Según tal versión, Santos acusa a Neymar de "mala fe" y cita violaciones del Reglamento sobre el Estatuto y Transferencia de Jugadores en la operación de su traspaso al Barcelona.
El Santos confirmó que presentó una demanda ante la FIFA pese a que Neymar es un ídolo para los hinchas del club pero debido a que su transferencia al Barcelona, según lo investiga la justicia española y la brasileña, fue hecha por un valor superior al realmente informado para evadir el pago de derechos e impuesto.
El Santos se dice perjudicado por haber recibido sólo 17,1 millones de euros por la transferencia de Neymar al Barcelona ya que un proceso en la justicia española por el cuestionado negocio eleva ese valor a 83,4 millones de euros.
"El Santos tan sólo quiere proteger sus derechos y obtener la reparación de las pérdidas que sufrió (con la transacción)", afirma el comunicado.
La nota agrega que la definición sobre si se produjo una violación contractual y la posible imposición de sanciones por las irregularidades son competencia de la Cámara de Resolución de Disputas de la FIFA y no del Santos.
"El Santos no tiene ninguna forma de control sobre cómo la FIFA decidirá el caso", agrega en su comunicado el club, que aclara que no puede pronunciarse sobre el estado del arbitraje por tratarse de un procedimiento sigiloso.
