El equipo está como está y el entrenador argumenta en su defensa las bajas continuas que está teniendo, y el club muestra su preocupación por el ambiente deprimido y de inseguridad que muestran y la baja condición física y de agotamiento que demuestran. Ante eso habrán barajado soluciones, que unas pasarán por Lopetegui y otras sin él. Con él, tendría que aceptar alguna solución para mejorar la condición física, pero eso dejaría en mal lugar al preparador físico que trajo de la selección.
En ese caso las soluciones ya pasarían por encontrar otro entrenador, capaz de manejar un equipo como el Madrid. Y no es fácil. Ha de conocer la Liga española bien, igual de bien la europea, tener predicamento entre los futbolistas, capacidad de comunicación para hacérselo creer, que también provoque fe a los madridistas y sin pasado dudoso, y templanza suficiente para aguantar muchas gaitas, y a destiempo. No es fácil. Pero siempre hay alguno…o alguien siempre señala a alguno, que de eso viven, cada día mejor, los intermediarios. La duda es si reconocer el error de un fichaje tan controvertido como fue el de Lopetegui, y al mes y medio fichar a otro, o probar con la paciencia cuando ya no se cree en ella. Entre esta tarde y mañana, la solución.