Ambos fallecimientos se produjeron cuando los niños tenían año y medio y en los dos casos tras sufrir fuertes traumatismos.
Según publica El Mundo, los progenitores estaban siendo investigados desde la muerte del primer hijo, en enero de 2018 y han sido detenidos este verano, después de fallecer el segundo.
La pareja mantiene su inocencia y dice desconocer el motivo por el que los niños perdieron la vida.