Según estas informaciones, el incidente habría tenido lugar tras un enfrentamiento entre varias personas armadas y uno de los miembros de la seguridad del complejo, que les impidió la entrada y que sufrió una herida de arma blanca en el proceso.
Tras ello, el miembro de la seguridad buscó refugio en el interior de un edificio del complejo, tras lo que estas personas llamaron a otras más y procedieron a incendiar el lugar, matando a siete personas que se encontraban dentro.
Testigos han indicado que el guardia había logrado escapar del lugar junto a varios clientes, quedando en el interior únicamente varios empleados. Entre las víctimas, que no pudieron ser evacuadas, habría dos mujeres, sin que por el momento se conozcan sus nacionalidades.
Las autoridades argelinas, que han anunciado la apertura de una investigación, han asegurado que al menos tres de los responsables del ataque ya han sido identificados.