El Gobierno considera que ya se están cumpliendo las condiciones que el líder de Ciudadanos ha propuesto para abstenerse y permitir su investidura, por lo que les sigue reclamando, tanto a PP como a Ciudadanos, una "abstención técnica" para que permitan que el Ejecutivo eche a andar, sin comprometerse a ejercer de sostén parlamentario de Sánchez.
Tras el anuncio de Rivera, que ha citado esta tarde al PP para proponer entre los dos a Sánchez una abstención ligada a tres condiciones sobre Navarra, Cataluña y la economía, fuentes del Ejecutivo han indicado a Europa Press que las exigencias de Rivera no se basan en "razones objetivas".
"En Navarra hay un gobierno que defiende la Constitución, en Cataluña también el gobierno de España vela por el cumplimiento de la Constitución y queremos bajar los impuestos a la clase media", razonan las fuentes consultadas.
Y es que Rivera exige a Sánchez iniciar unas conversaciones para que "gobiernen Navarra Suma y el PSE en una coalición negociada y seria"; comprometerse a no indultar a los presos del 'procés'; poner en marcha una mesa para aplicar el 155 en Cataluña si no se acata la sentencia del 'procés' y garantizar que no subirá impuestos a las familias ni las cuotas a los autónomos.
Pero en el Ejecutivo creen que no se dan ninguna de estas tres razones en las que Rivera basa sus demandas, por lo que piensan que no hay motivo alguno que impida la abstención de Ciudadanos. "No hay pacto con Bildu ni lo habrá. El 155 se aplicaría si la situación constitucional lo requiere, como ya se hizo", abundan las fuentes, que recuerdan que no está en los planes del PSOE subir la presión fiscal sobre las clases medias y trabajadores.
De ahí que desde el Gobierno sigan invitando a PP y a Ciudadanos a que "desbloqueen" la investidura, petición que los dos partidos han rechazado de forma reiterada. Rivera incluso llegó a rechazar una invitación de Sánchez para una entrevista bilateral cuando el líder socialista ya tenía el encargo del Rey para intentar formar gobierno.