El Comité Federal del PSOE va a aprobar este sábado el aplazamiento de su 39 Congreso Federal, que estaba previsto celebrarse en mayo para elegir al secretario general, hasta que haya un nuevo gobierno.
La propuesta del líder socialista, Pedro Sánchez, y de su dirección va a contar con un amplio apoyo, puesto que ninguna federación ha puesto objeciones al retraso del congreso ordinario debido a la incertidumbre que rodea el proceso de investidura.
Ante la duda de si habrá o no nuevas elecciones, el Comité Federal, en el que participan todos los barones territoriales, no va a fijar una nueva fecha y se esperará hasta la formación del nuevo gobierno para volver a convocar la asamblea.
La resolución que va a aprobar el máximo órgano del partido deja sin efecto el calendario acordado el pasado 30 de enero, cuando federaciones como Andalucía, Asturias o Comunidad Valenciana reclamaron que el congreso fuera en mayo, en vez de en junio, como propuso Ferraz en un principio.
Los plazos iban a arrancar a mediados de abril con la presentación de precandidaturas. Las primarias para elegir al secretario general estaban fijadas el 8 de mayo y dos semanas después -días 20, 21 y 22-, tendría lugar la asamblea para refrendar el nombramiento.
El retraso del cónclave ha evitado la posible pugna entre Sánchez y la presidenta andaluza, Susana Díaz, quien, no obstante, no había confirmado si estaba dispuesta a optar a la secretaría general.
En la reunión del Comité Federal en la sede de Ferraz, Sánchez va a informar del estado de las negociaciones para formar gobierno tras la reunión que mantuvo el pasado miércoles con el líder de Podemos, Pablo Iglesias.
El PSOE ha anunciado que la próxima semana se pondrá en marcha la mesa a tres bandas en la que también va a participar Ciudadanos con la idea de intentar fraguar un acuerdo que evite las elecciones.