Su portavoz ha detallado que, sobre las 12,00 horas de este domingo, y tras entrar normalmente por la frontera de Beni-Enzar, el vehículo ha pegado un acelerón y se ha saltado los controles de Policía Nacional y Guardia Civil, logrando salir del recinto fronterizo con extremo riesgo para funcionarios de fuerzas de seguridad de servicio y posibles transeúntes. Poco después, tanto el conductor como el acompañante han abandonado el coche junto a la gasolinera cercana, si bien han sido perseguidos y detenidos.
El vehículo llevaba cuatro inmigrantes ocultos; en concreto, una mujer en el salpicadero y los otros tres, varones, en un doble fondo bajo asientos traseros.
Dos de los policías que han intervenido en la detención han recibido asistencia sanitaria por contusiones en rodillas y manos.