El proyecto planteado por Ribó consiste convertir el Nuevo Cauce en un corredor verde que conecte los parques naturales del Turia y la Albufera. La idea es dotar al cauce –que permanece seco todo el año en gran parte de su trazado- de un pequeño caudal ecológico permanente utilizando agua procedente de depuradoras. A ambos lados se crearían zonas de vegetación y fauna típicas de ribera, con infraestructuras blandas de uso ciudadano como paseos ciclopeatonales o campos deportivos.
Hace un año el alcalde anunció su intención de presentar el estudio de viabilidad del proyecto a todos los ayuntamientos del área afectada así como a la Confederación del Júcar, que debería dar su permiso para ocupar el Nuevo Cauce. Ribó ha diho hoy que "todavía estamos viéndolo con la Confederación y tenemos que hablar con los municipios".
Estrategia Urbana 2030
El alcalde se ha referido a este asunto durante la presentación de la Estrategia Urbana 2030, un documento en el que el gobierno local va a trabajar durante los dos próximos años para definir el modelo futuro de la ciudad. La Estrategia va más allá de la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU)que el Ayuntamiento puso en marcha en 2014 y que, por cierto, todavía no se ha aprobado. El documento incorporará los criterios que marca la ONU a través de la Agenda Urbana y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
La intención del gobierno local es tener listo el documento en diciembre de 2022, después de un proceso de elaboración y participación ciudadana que se pone ahora en marcha. El alcalde ha explicado que uno de los criterios de partida, presente también en la revisión del PGOU, es actuar "en la ciudad consolidada", es decir, frenar el crecimiento urbano más allá del actual casco urbano para evitar dar nuevos bocados a la huerta. En este sentido, el Ayuntamiento pretende que todos los barrios tengan la dotación mínima de servicios públicos que estaba prevista en el Plan General.