La Junta General Ordinaria de accionistas del Elche CF tendrá que esperar hasta el mes de enero para poder llevarse a cabo. Así lo decidió la semana pasada el Consejo de Administración que preside Diego García, que prefiere esperar a que se aclare la subasta anunciada por el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) y la posible llegada de un nuevo inversor que se haga cargo de la deuda con el organismo valenciano y de la situación económica de la entidad franjiverde.
La ley que rige el funcionamiento de las sociedades de capital obliga a que el balance del último ejercicio económico se exponga durante los seis meses posteriores al cierre del ejercicio. En el caso del Elche CF, como sociedad anónima deportiva, el último curso contable se cerró el pasado 30 de junio, por lo que la fecha límite para la Junta General Ordinaria de accionistas tendría que celebrarse antes del 31 de diciembre, hecho que no se va a poder producir porque ya no hay tiempo material.
Ante esta situación, el club franjiverde pretende celebrar su Junta durante el primer mes del año 2018, en enero, una vez que el director general del IVF, Manuel Illueca, anuncie la subaste y se empiecen a postular los inversores que están dispuestos a inyectar capital en el Club y a poner en marcha su nuevo proyecto. En estos momentos hay dos alternativas confirmadas: la del anterior dueño del Albacete, José Miguel Garrido, y la del expresidente José Sepulcre con el respaldo económico del empresario navarro Luis Oliver.
Para este curso, el Elche CF presentará un déficit correspondiente a la temporada 2017/18, en el Grupo III de Segunda División B, de 500.000 euros de gasto corriente y de otros 500.000 euros correspondientes a amortizaciones.