Sueldos ridículos, convenios colectivos al límite y un trabajo que acaba con lesiones físicas e incapacidad. Así definen los trabajadores de los geriátricos su situación. Ayer salieron a la calle y seguirán haciéndolo, dicen, si la situación no revierte.
En la provincia de Castellón hay 2000 trabajadores en centros de mayores que cobran apenas 1.000 euros y hacen jornadas interminables. Un colectivo que ha empeorado su situación con la crisis sanitaria por la fuga de un 30% de personal hacia la pública, con mejores condiciones laborales. La protesta impulsada por CCOO comenzó ayer y continuará el próximo día 8 frente a la Generalitat y el 15 ante el ministerio.
El sindicato denuncia además que en Castellón faltan plazas públicas en residencias de la tercera edad. La OMS recomienda 5 por cada 100 habitantes mayor de 65 años mientras que Castellón solo tiene la mitad. Calculan que el déficit en Castellón es de 2000 plazas de geriátrico.