La Ley 4/2006 de 19 de mayo, de la Generalitat, de Patrimonio Arbóreo Monumental de la Comunitat Valenciana supuso proteger genéricamente, sin necesidad de resolución singularizada, los ejemplares de cualquier especie arbórea que igualen o superen uno o más de los siguientes parámetros: 350 años de edad, 30 metros de altura, 6 metros de perímetro de tronco, medido a una altura de 1,30 m de la base y 25 metros de diámetro mayor de la copa, medido en la proyección sobre el plano horizontal.
Esta normativa implicó una ralentización en el expolio de olivos milenarios del norte de Castelló en las inmediaciones de la Vía Augusta, donde existe la mayor concentración de Europa de estos vegetales y que responden a estas características, pero no la protección efectiva y definitiva.
“Quienes comercian siguen haciéndolo bordeando la ley, ya sea en la vecina autonomía de Cataluña, donde no es de aplicación la mencionada ley, podando la copa de los árboles antes de su transporte o utilizando ejemplares de menor antigüedad, algo complejo de evaluar para los agentes que puedan participar en los supuestos controles”, ha indicado Mulet.
Recientemente organizaciones de les Terres de l’Ebre y agrícolas del Maestrat, en Castelló, así lo han denunciado en los medios de comunicación. La coalición ha registrado de momento en el Senado varias preguntas para conocer el alcance de las medidas y la efectividad de la ley valenciana, que fue pionera en el Estado, para proponer su extensión a otras autonomías con el objetivo de evitar problemas de coordinación y que se produzcan nuevos expolios o extracciones como los recientemente denunciados.