Siete detenidos en Alicante acusados de cinco robos en el colegio público Benalúa
Uno de los menores detenidos, considerado como el cabecilla del grupo, conocía perfectamente las instalaciones del colegio, ya que estuvo realizando un curso de verano
Alicante | (Publicado 15.12.2020 11:31 )
La Policía Nacional de Alicante y de Baleares ha detenido a los autores de la comisión de cinco robos con fuerza ocurridos en el colegio público Benalúa tras desplegar un dispositivo policial de seguridad ciudadana y de investigación ante la alarma social generada en los padres de los niños y en la dirección escolar por la reiteración delictiva de los hechos ocurridos.
La relación de los objetos sustraídos y daños denunciados supera los 10.000 euros. Entre ellos, proyectores valorados en 400 euros, varios televisores, ordenadores, monitores, termómetros digitales, altavoces, pantallas, grapadoras, tijeras y demás material escolar, además de numerosos postres infantiles, un jamón y otros alimentos.
Hasta el momento, los agentes han podido recuperar dos proyectores, un termómetro digital y alimentos sustraídos en la cocina del colegio. Objetos que escondían después de cada robo en lugares cercanos al centro, para posteriormente venderlos por las vías habituales de compra venta de efectos robados. Uno de los arrestados ha sido acusado de receptación de material sustraído.
Los detenidos, imputados por robos con fuerza, daños y receptación, seis de nacionalidad española y uno de nacionalidad marroquí, con edades comprendidas entre los 15 y 18 años, con numerosos antecedentes policiales por hechos similares, han sido puestos a disposición de la Fiscalía de Menores y de los juzgados de Guardia de Alicante y de Palma de Mallorca.
Según han indicado fuentes policiales, desde un primer momento, la Comisaría de Distrito Centro, mantuvo contacto permanente con la dirección del colegio para recabar toda la información necesaria para el inicio de la investigación, comunicar las medidas que se estaban tomando y para trasladar confianza a los padres de los alumnos ante la preocupación mostrada.
Las investigaciones practicadas por la policía científica dieron como resultado el hallazgo de unas huellas dactilares correspondientes a un joven de 18 años con antecedentes policiales y que fue localizado en Palma de Mallorca.
Los agentes consiguieron identificar, tras numerosas gestiones, a todos los miembros del grupo, muchos de ellos con un amplio historial delictivo pese a su minoría de edad. Era, además, su única forma de vida.
Uno de los menores detenidos, considerado como el cabecilla del grupo, conocía perfectamente las instalaciones del colegio, ya que estuvo realizando un curso de verano. Conocía los accesos de entrada y salida, la exacta ubicación de los efectos de valor sustraídos, así como el funcionamiento de los sistemas de seguridad ya que se ocultaba hasta que la alarma dejara de sonar.