De poco sirve que las administraciones apliquen medidas para frenar los contagios por coronavirus si luego una parte de los ciudadanos se comportan de forma irresponsable. Durante este fin de semana hemos encontrado varios ejemplos de esa irresponsabilidad. El día 17, la Policía Municipal realiza control telefónico a personas confinadas en su domicilio por COVID. De los 26 ciudadanos controlados, con cuatro no ha sido posible contactar con ellos ni a través de teléfonos ni yendo a sus domicilios.
Junto a este hecho, también se han vuelto a registrar varias denuncias por realizar fiestas y reuniones en casas vulnerando la normativa COVID-19. La Policía Municipal ha interpuesto tres denuncias por otras tantas reuniones en viviendas de la capital. Se ha denunciado a una veintena de personas por estos hechos.
Además, 11 han sido las personas apercibidas en los diferentes controles de accesos a la ciudad, 2 por acceso o salida a la ciudad sin motivo justificado, otras dos por no hacer uso de la mascarilla y 26 por consumir alcohol en la vía pública