Centenares de peregrinos, entre ellos el presidente del Govern, José Ramón Bauzá, ha participado durante la pasada madrugada en la XXXIV Pujada a Lluc a Peu de la Part Forana.
En ésta, la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Salom, y el vicepresidente, Joan Rotger, han sido los encargados de depositar la ofrenda floral de la institución durante la ceremonia que ha tenido lugar a primera hora de este domingo, en la zona del Acogida, y que ha constituido el acto central.
La edición de este año de la Pujada ha coincidido con la conmemoración del Año Juníper Serra y ha marcado el inicio de los actos de celebración de la Diada de Mallorca, ha informado la institución insular en un comunicado.
La comitiva de la institución insular, encabezada por su presidenta, ha realizado a pie el recorrido desde Inca hasta Lluc, por lo que ha coincidido en el punto de partida con Bauzá y la presidenta del Parlament, Margalida Duran.
En Lluc, cientos de peregrinos se han concentrado en la zona de la Acogida, donde, además de la ofrenda floral, ha tenido lugar un oficio religioso presidido por el obispo de Mallorca, Xavier Salinas.
La intervención de bienvenida la ha realizado el prior de Lluc, Antoni Vallespir, quien ha cedido la palabra al presidente de la Asociación de Antiguos Blavets, Gabriel Ferragut, encargado de pronunciar el pregón de este año.
Durante la ceremonia se ha rendido homenaje a Arnau Fuster, un marxaire de Sineu, de 71 años de edad, que ha participado en todas las ediciones y a quien el presidente del Govern ha entregado una insignia.