El congreso extraordinario convocado por el Partido Popular para los días 1 y 2 de abril no sólo servirá para cambiar la estructura nacional de la formación. Será el pistoletazo de salida para que muchas autonomía, entre ellas Asturias, puedan celebrar sus cónclaves regionales y así dar oficialidad a los dirigentes que figuran como interinos o bien relevar las cúpulas.
Teresa Mallada es la presidenta del PP de Asturias el 20 de octubre de 2020, cuando fue designada por la junta directiva de la formación. Fue un paso importante para cerrar la etapa de Mercedes Fernández al frente del partido y la ratificación de la apuesta de Génova por la política allerana.
Lo que sí quedó pendiente fue la celebración del congreso regional en el que se diese la voz a los afiliados. Entre la pandemia y las continuas citas electorales se fueron retrasando la celebración y además, Asturias, como comunidad uniprovincial es una de las últimas en celebrar su congreso.
La nueva situación que salga de la cita de Sevilla hará que se aceleren los trámites y Mallada confía en poder celebrar el congreso lo antes posible para terminar con una situación, que sin entorpecer su tarea política, sí puede incomodar por la sensación de interinidad y la falta de ratificación por parte de los afiliados.
La duda se planteará si se forma alguna candidatura alternativa a la de Mallada, algo que no parece muy probable en estos momentos, pero que nadie se atreve a asegurar ante los cambios que se avecinan en la formación que presidirá Alberto Núñez Feijóo a partir del congreso nacional.
