La Federación Aragonesa de Fútbol da por zanjada la polémica entre el Ayuntamiento de Zaragoza y el Gobierno autonómico, confirmando que el concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, será el interlocutor de la candidatura de la ciudad para acoger partidos del Mundial de 2030. Antes de que la Federación tomase esa decisión, Javier Lambán, apostó por buscar un perfil técnico y no político, pero dejó claro que respetaría el acuerdo del organismo.
El pleno aprobó además que el nuevo campo de fútbol se quede en Romareda, con el voto a favor de Podemos, que acordó con PP-Ciudadanos un campo de media capacidad en el Parking Norte. Lambán mostró sorpresa con este asunto ya que los terrenos son del Gobierno aragonés.