Los empresarios consideran que esto no compensa que los autónomos no hayan sido incluidos en las ayudas al funcionamiento.
Lamentan que no se esté entendiendo bien el problema al que se enfrentan cada día, ya que no solo tienen que luchar para sacar su negocio adelante en peores circunstancias, sino que a esto se suma la falta de relevo generacional.
Algo que podría remediarse si las bonificaciones se ampliaran hasta el máximo permitido por Europa, que llega al 20%.