La tenista, que fue número 7 del ránking individual y número 1 de dobles, ha explicado en las redes sociales que hace unos días un grupo de ladrones entró en su casa de Taranto, Apulia (sur), y se llevó varios objetos.
"Entre las cosas que me fueron sustraídas había algunas cuyo valor económico para mí no es para nada comparable con su valor sentimental: los trofeos que he ganado durante mi carrera", confiesa la ganadora de diez títulos individuales y 25 en la categoría de dobles.
"Desde el día en el que cogí la raqueta por primera vez hasta hoy he trabajado, luchado, sudado por el tenis y por alcanzar mis metas en este deporte. Esos trofeos, aunque sean un simple símbolo, me recuerdan cada día la razón por la que todavía me entreno, salgo a la pista y trato de mejorar en cada ocasión", escribe.
Vinci asegura que el robo ha "sido un gesto de cobardía y de estupidez" y lanza un mensaje a los responsables del delito: "Me gustaría decirles a quienes ahora los poseen que mis recuerdos, lágrimas, sudor, cansancio, sonrisas, esfuerzo y sacrificios no se los podrá llevar nadie. Ni a mí, ni a las personas que caminaron junto a mí en este tiempo".