Fue el 1-1 final un fiel reflejo de lo ocurrido sobre el terreno de juego durante todo el partido. Más de 90 minutos de inoperancia rojiblanca y un mayor empaque de la Real, que hasta pudo lograr el 1-2 en medio del asedio final rojiblanco.
Abrió el marcador Aduriz batiendo desde los once metros con 'paradinha' a Gerónimo Rulli en un penalti en el quedó la duda sobre la gravedad de la entrada al ariete local de Carlos Martínez, que fue expulsado, y si Aduriz hizo una falta anterior al meta argentino en una disputa aérea.
Si el Athletic no ha conseguido su propósito de asaltar la zona europea, la Real regresa contenta a casa encadenando su sexto derbi sin perder ante el vecino vizcaíno. El partido comenzó muy parejo de fuerzas, con el Athletic buscando hacerse con el dominio del juego y la Real tratando de impedirlo e intentando atemorizarle a la contra.
Ninguno de los dos consiguió su objetivo porque los locales no acababan de llegar con opciones al área rival ni los visitantes sacaban partido de balones en condiciones que encontraban cerca de la zona de influencia de Iraizoz.
Así, al Chory Castro, a Vela y a Bergara se les fueron alto o desviado tres disparos desde la frontal. Más peligro creo el delantero mexicano, hoy de delantero centro, en un disparo muy escorado a la base del poste que el meta local mandó a córner y, sobre todo, con un lanzamiento en parábola desde unos 25 metros que cayó por encima del larguero.
De haberlo hecho por debajo, quizás hubiese sido gol. El Athletic solo remató una vez con opciones a la meta de Rulli, que despejó brillantemente un remate de cabeza de Aduriz tan espléndido como la jugada que posibilitó el cabezazo elaborada por Beñat, Aketxe y Balenziaga, que fue el que centró.
La segunda mitad empezó por los mismos derroteros que la primera cuando llegó la jugada que pareció decantar el partido. Un penalti de Carlos Martínez a Aduriz con la consiguiente expulsión del central visitante.
Fue una jugada polémica en la que quedó la duda de la gravedad de la falta de Carlos Martínez y si hubo una falta anterior en una disputa aérea de Aduriz con Rulli. El ariete internacional ejecutó con 'paradinha' a Rulli para sumar su decimoquinto gol del presente campeonato liguero y el vigésimo segundo en lo que va de temporada.
Cuando parecía tener casi todo hecho el Athletic, la Real reacción, echó mano del espíritu que siempre exhibe en los derbis y logró el empate con un golazo de De la Bella, que enganchó un buen disparo cruzado tras recibir de Pardo un buen pase interior mal defendido por Susaeta.
Iraola lo intentó desde la frontal pero la Real se había crecido. Sobre todo Vela, que le buscó de nuevo las costillas a Iraizoz con dos disparos lejanos, el segundo tras una larga carrera. Aunque fue Williams el que más cerca estuvo del gol con un disparo desde el vértice del área que salió lamiendo el palo.