El conjunto de Zinedine Zidane, gran favorito para conquistar el Mundial de Clubes, afronta la cita consciente de que la confianza podría ser su peor enemigo. La enorme diferencia de nivel entre el campeón europeo y el resto de participantes podría hacer caer en la trampa al cuadro merengue si subestima a su oponente.
Eso es lo que no quiere Zidane, que reservó a sus primeros espadas el pasado fin de semana ante el Deportivo para llegar pleno de gasolina a las semifinales del 'Mundialito'. Sin embargo, quien no estará es -precisamente- el héroe del triunfo ante los gallegos: Sergio Ramos, que arrastra una sobrecarga muscular desde entonces.
Esa es la única baja del conjunto merengue -además de la de Bale- para un partido que no debería suponer grandes problemas y que llega en buen momento para los recuperados Kroos y Casemiro, quienes ya han tenido oportunidad de jugar algunos minutos antes de realizar el viaje a tierras niponas.
La historia juega en favor del Real Madrid
Los blancos, campeones en 2014, nunca han perdido en el 'Mundialito'. Los de Chamartín han jugado seis partidos -4 victorias y 2 empates-, pero más allá de los números en este certamen, los de Zidane presentan una imponente estadística de 35 partidos sin conocer la derrota.
Los vigentes campeones de Europa, con Cristiano estrenando 'Balón de Oro', suman 26 victorias y 9 empates desde su última derrota en abril -ante el Wolfsburgo- habiendo jugado ante Atlético y Barça en sus respectivos estadios, o habiendo visitado al Borussia Dortmund o Manchester City, entre otros, en la máxima competición continental.
Es el mejor aval para un Real Madrid que pretende volver a bordar el logo dorado de la FIFA en el pecho de su camiseta. Una cita cuya gran amenaza es la relajación o la confianza, la misma que dejó en el camino al Atlético Nacional, el campeón de Sudamérica, en su estreno ante los anfitriones nipones.
Un gran homenaje al Centenario
El Club América no ha podido conmemorar su centenario de mejor manera. Los mexicanos superaron en cuartos de final al Jeonbuk Hyundai surcoreano (1-2) y despejaron la tensión para cumplir con su presencia entre los cuatro mejores del torneo. Las 'Aguilas' acuden a Yokohama con la intención de complicar el futuro merengue el año que cumplen 100.
El cuadro dirigido por Ricardo La Volpe llega con la recuperación del capitán Rubens Sambueza, cuya presencia dará más dominio a los centroamericanos en la posesión del balón. La responsabilidad goleadora recaerá en Silvio Romero, que atraviesa un gran momento tras anotar los dos goles en el primer partido de su equipo en la cita japonesa.
Los mexicanos, en caso de ganar, se convertirían en el primer equipo de su país en alcanzar la final del Mundial de Clubes. Para el Real Madrid, por su parte, sería la segunda tras la de 2014, cuando ganó en Casablanca al San Lorenzo argentino. Sus anteriores participaciones fueron en el año 2000 -con otro formato- y en la extinta Copa Intercontinental, de la que es triple campeón.
