En la etapa más larga de la carrera, de 197 kilómetros con inicio en Sant Joan Despí y final en Vilanova i la Geltrú, el líder de la ronda catalana, el colombiano Nairo Quintana, mantuvo la renta de siete segundos sobre el español Alberto Contador, de Tinkoff, segundo en la general, mientras que a 17 sigue el australiano Richie Porte, de BMC, tercero.
El italiano Davide Cimolai, al esprint, se llevó la victoria en la meta de Vilanova i la Geltrú después de que el pelotón acabara con las esperanzas de los cuatro supervivientes de la fuga del día, a un kilómetro de la meta.
Fue un día de transición -de entre guerras-, pero aun así con múltiples intentos de escapada y un temprano esprint intermedio en el que, como ayer, Daniel Martin, de Etixx-Quick Step, fue el más rápido. El irlandés rascó tres segundos que le permiten situarse a tan sólo uno del tercer puesto en la general, que ocupa Richie Porte.
A diferencia de ayer, cuando consiguió un segundo de bonificación en el primer esprint intermedio, Contador no lo intentó en sus aspiraciones de reducir la desventaja con respecto a Quintana, si bien en los últimos kilómetros probó, sin éxito, mover la carrera.
La fuga del día llegó a 135 kilómetros de meta cuando once ciclistas con pedigrí, pero sin opciones en la clasificación general, se separaron del gran grupo.
Entre los 'notables' destacaban el colombiano Esteban Chaves, de GreenEDGE, Petr Vakoc, de Etixx-Quick Step, y el canadiense Ryder Hesjedal, Trek Segafredo, que llegaron a tener una ventaja de 5 minutos y 15 segundos.
Su aventura, sin embargo, duró lo que tardaron el IAM Cycling y el Lampre-Merida en apretar las tuercas para cazar a los aventureros, reagrupar el gran grupo y buscar un final masivo reservado para los pocos velocistas presentes en la carrera catalana.
Asimismo, los gregarios de Contador aceleraron la carrera a 19 kilómetros de meta buscando sorprender a Quintana que, arropado por sus gregarios, no cedió.
La estrategia de los velocistas
El español Amets Txurruka, del Orica GreenEDGE, también trabajó para neutralizar a los fugados, a los que les sobró un kilómetro para conseguir su proeza. A pocos metros de meta el pelotón se reagrupó y los velocistas prepararon la estrategia para conseguir la victoria.
Sin Ben Swift, de Sky, que se retiró hoy, ni Nacer Bouhanni, de Cofidis, vencedor de las dos primeras etapas, los favoritos se reducían a especialistas como Gianni Meersman, de Etixx-Quick Step, y Simon Gerrans, de Orica GreenEDGE, que partían con ventaja.
Finalmente, el más rápido fue Davide Cimolai. Una victoria importante para el Lampre-Merida, que logra su primer triunfo de etapa del curso en una carrera WorldTour.
En la general todo sigue igual. Quintana mantiene la ventaja de siete segundos sobre Contador, Porte está a 17 y el irlandés Daniel Martín, a 18, puede discutirle mañana el tercer cajón del podio al australiano del BMC, ya que el liderato le queda algo lejos.
El final de la Volta
Como viene siendo tradición, la Volta terminará este domingo con una etapa en la que las ocho ascensiones a la mítica montaña de Montjuïc dictarán sentencia.
Ante lo apretada que está la general, la bonificación de los dos esprint intermedios, así como los diez, seis y cuatro segundos para los tres primeros que lleguen a meta pueden ser determinantes.
Aunque si se tiene en cuenta lo sucedido en los últimos años, no parece que mañana puedan cambiar mucho las cosas. Y es que en las tres últimas ediciones, el corredor que acabó líder en la penúltima etapa fue quien, finalmente, inscribió su nombre en el palmarés de la ronda catalana en la etapa 'nerviosa' de Montjuïc.
Así pues, Quintana lo tiene todo a su favor para llevarse su primera Volta a Catalunya, aunque no se puede fiar. Detrás tiene al dos veces campeón del Tour de Francia y al vigente ganador de la Volta. Montjuïc decidirá.