Paco Jémez: "Me encantaría saber por qué tengo que pedir perdón"
El entrenador canario regresa al Rayo y lo hace fiel a sí mismo. "No intento caer bien a todo el mundo, creo que es innecesario e improbable, pero vengo a dejarme todo lo que tengo", aseguró en rueda de prensa.
Paco Jémez, entrenador del Rayo Vallecano, elogió a su antecesor en el cargo, Miguel Ángel Sánchez Muñoz, 'Míchel', destituido por los malos resultados y del que dijo que es "un gran amigo y un gran rayista" y sabe lo que representa en el club.
Paco Jémez ha regresado al Rayo Vallecano, club en el que estuvo entre 2012 y 2016 en Primera.
"Ahora vuelvo por el cese de un entrenador querido, que es un gran amigo mío y es un gran rayista, pero en el fútbol, no siempre trabajando bien, salen los resultados", dijo Jémez, al explicar la sensación que había tenido al entrenar a su nuevo vestuario.
"Los jugadores están tristes porque saben también lo que representa Míchel y la situación anímica hay que cambiarla. Es la parte más importante que tenemos. Hay que limpiar la cabeza de todo lo malo, que vean un horizonte más limpio y optimista, pero eso no se conseguirá en dos días", apuntó.
De toda la afición del Rayo, siete peñas emitieron un comunicado en el que criticaban la destitución de Míchel y la llegada de Paco Jémez, al que achacan "meteduras de pata y faltas de respeto hacía la masa social" del club.
"Lo más importante es que sigan estando con el equipo, porque yo respeto la opinión de todo el mundo. Entiendo que haya gente que no esté contenta con mi llegada, pero lo más importante es que las peñas van a estar con el equipo", manifestó.
"No intento caer bien a todo el mundo, creo que es innecesario e improbable, pero vengo a dejarme todo lo que tengo", señaló Jémez, que dijo que le "gustaría saber por qué" tiene que "pedir perdón".
"Nunca he faltado al respeto a la masa social o a algún aficionado. Hubiera sido mejor tener una reunión con ellos y que explicaran sus motivos. Jamás he faltado al respeto y si lo hiciera pediría perdón", señaló.
"Que ellos querrían tener a Míchel lo puedo entender, sé lo que representa aquí y sabía que sería complicado sentarse en este banquillo después de él, pero me encantaría saber por qué tengo que pedir perdón", declaró.
En ese comunicado, las siete peñas del Rayo dijeron que "quien se fue a Segunda con la cabeza alta fue la afición del Rayo mientras él prefirió abandonar el barco".
"No he abandonado un barco en mi vida. Cometí un error y si volviera atrás seguramente tomaría otra decisión distinta. Puedo entender que se sintieran ofendido porque me marchara, pero los entrenadores vamos y venimos y los clubes se quedan. Aún así, respeto su decisión", concluyó.