El Barcelona gana el primer partido de la final de la Liga Endesa

Quien da primero...

Un triple para la Historia de la ACB. Marcelinho Huertas, en el último segundo, a 11 metros del aro y con Sergio Rodríguez tratando de desequilibrarle ha anotado la canasta de su vida. Y quizás de la final. La canasta de la temporada para brindarle al Barcelona, quizás, algo más que un partido.

ondacero.es

Madrid | 07.06.2012 13:00

Triple de Huertas
Huertas lanza el triple de la victoria | ACB

El término justicia en el baloncesto, y en el deporte, es muy relativo. ¿Es justo vencedor el Barcelona? Si habláramos de boxeo diría que no. Pero estoy hablando de ba-lon-ces-to. El Real Madrid dominó el tempo y el marcador durante 39 minutos. El Barcelona lo hizo en el momento decisivo. Sólo en el tercer cuarto cuando Llull machacó el aro rival para situar a su equipo con 17 puntos de ventaja, el marcador reflejaba la diferencia de juego entre ambos equipos. El equipo blanco era entonces duro en defensa, agresivo en ataque imponiendo un ritmo frenético. Así fue hasta que quedaban 5 minutos para el final. Entonces el Barcelona apeló a la épica y a Juan Carlos Navarro, el mejor jugador europeo aún mermado físicamente. El partido, y quizás la final, se resume en un minuto épico que ya es leyenda de nuestro baloncesto.

 

La discusión, viendo las imágenes, se basará a buen seguro en si Sergio Llull acertó en la última jugada antes del triple imposible de Huertas. Algunos, a buen seguro una mayoría, piensa que lo mejor hubiera sido buscar una penetración ante la defensa de Navarro, a quien supera físicamente y en velocidad. Pero si das a la pausa verás que "La Bomba" le da el espacio suficiente para que Llull dude qué es mejor y observarás que reacciona el defensor ante el intento del menorquín de iniciar la entrada a canasta. Si hubiera anotado Llull se hablaría de su triple y no del posterior de Marcelinho. Así es el baloncesto. ¿Quieres que opine sobre la jugada de Llull? Está bien ejecutada y yo habría hecho lo mismo.

Más allá de esos últimos 30 segundos de partido, el Real Madrid pierde el encuentro antes. Porque si algo me queda claro del vibrante y brillante primer partido de la final es que el Barcelona se encontró la victoria cuando menos la esperaba. Se espesó y ralentizó el ataque blanco, quizás queriendo amasar la ventaja, sin Carroll ni Sergio Rodríguez en pista. Una vez volvieron el encuentro ya se había convertido en un cara o cruz. Y en ese lanzar la moneda al aire en el que se convirtió el tramo final del partido cabe destacar un momento crucial.

Apenas 50 segundos para el término del partido. Sergio Llull, omnipresente en las jugadas decisivas, penetra y asiste a Tomic quien debajo del aro recibe un tapón de Lorbek. Acto seguido Navarro anota un triple tras salida del bloqueo. Empate a 78. El triple de Navarro no me sorprende, hemos visto cientos de ellos. Que Lorbek, un 2,09 que apenas levanta los pies del suelo, tapone a Tomic, con sus 2,17, me deja ojiplático.

¿Afectará al resto de la serie? Es imposible que no lo haga. Leo que si el Barcelona gana el primer partido siempre consigue alzar el título. Si así ha sucedido hasta ahora será por algo. Pero no convendría dar por vencido al Real Madrid. Un hecho para que no quites ojo ni un segundo a la final: el Madrid perdió de manera dolorosa el tercer partido de la semifinal y consiguió ganar en Vitoria el cuarto y vencer en el quinto. Entonces mostró madera de campeón. Mañana a las 22 horas nueva prueba de fuego. Con La 1 de TVE como testigo. Para gloria del baloncesto. Gracias a ambos equipos por un partido como el de ayer. Épico y para la Historia.