"Pá comerse Madrid" con Isabel aires
Manos tiznadas de calçots
Hay un vegetal fascinante que tiene un proceso de cultivo, plantado y replantado que tarda casi más de un año hasta finalizar su crecimiento y estar preparado para recolectar y comer. Hablo de los calçots o cebollas tiernas, y ahora estamos en plena temporada. Y aunque pensamos que los calçots solo se cultivan en Valls (Cataluña), resulta que en Consuegra (Toledo), se hace la mayor producción de España. Hay que hacerlos a la brasa o al sarmiento con llama viva, y cuando nuestras cebollas empiezan a ‘llorar’, se envuelven en papel de periódico y se ponen sobre una teja para que conserven el calor, y luego ya a ‘desnudar’ el calçots y mojarlos en bien de salsa romescu, eso si, con nuestro baberito puesto para no mancharnos o tiznarnos…