La mirada cítrica: "Reguero interminable de pérdidas económicas"

Esto del Covid está dejando un reguero interminable de pérdidas económicas. Los efectos de la pandemia no solo afectan con dureza a las economías del sur de Europa. La economía del Reino Unido también naufraga en el Mar del Norte.

El Gobierno de Boris Johnson se enfrenta sin Pompa alguna a las circunstancias. La economía británica caerá este año más del 14%, el mayor descenso en 300 años, desde las rebeliones jacobitas, según la Oficina británica de responsabilidad presupuestaria

El rebrote del Covid incrementa la incertidumbre. En España el año se va a despedir con un descenso del 11,5%, según el BBVA. Empeoran las previsiones y, aunque mejoran para el próximo año, la reactivación será incompleta. El año que viene solo crecerá el 7% y de manera irregular, el turismo da por perdida la campaña turística de este año y la recuperación no llegará hasta el 2022. La ola del crecimiento se hace de rogar a la orilla del mar.

Y hasta el Mar Báltico va a llegar el presidente del Gobierno en su gira para conseguir apoyos al Fondo de Recuperación, hasta Suecia, esta tarde se ha visto antes con Angela Merkel. La clave está no solo en el dinero, sino en si va a haber o no Troika: en los supervisores para vigilar las reformas en el mercado laboral y en las pensiones.

El Gobierno pinta de verde toda su nueva política económica. Ya ha dado la orden para iniciar la elaboración de los Presupuestos que tendrán tres vectores: la digitalización, unión Europea y la economía verde.

Entre medias, Abengoa es protagonista y Bruselas, según Financial Times, prepara una ofensiva para acabar con los regímenes fiscales de baja tributación, como por ejemplo Holanda, Irlanda o Malta. Es la venganza de los cuatro grandes y podría ser el crepúsculo de estos semi-paraísos fiscales.