Una chica de Úbeda que había denunciado a sus padres por haberla castigado se ha escapado del centro de menores donde se encontraba desde el conflicto familiar. El padre de la niña nos cuenta en Herrera en la onda que "lo que está sucediendo no es normal".
Los fósforos valoran este caso y expresan cual creen que ha de ser la manera de educar a los hijos para no llegar a estos niveles.
Nos llaman unos consultores educativos, con una web para adolescentes con problemas: "enviamos a chicos a EEUU donde se rehabilitan. Chicos sin límites, drogas, violencia, falta de respeto etc. La pauta común es el problema del dinero, y no tener unos límites claros, desterrar la palabra "depende".
Ana nos cuenta que su hijo de 12 años le hace pasar un infierno en casa. "Sacaba notas sobresalientes, un niño normal. Este año ha entrado en el instituto y yo no lo conozco, se ha hecho un sinvergüenza, un cínico, macarra. He ido mil veces al instituto, a mi niño lo insultan, lo amenazan los macarras con partirme a mi las piernas si dice algo. La Asociación de Padres no puede hacer más. Ha bajado las notas, en el psicólogo miente y no aguanto más".
Nuria nos deja otro testimonio: "me gustaría decirle a los padres que se tienen que mantener firmes pero sin que se vea ni un resquicio de debilidad. La culpa lo tiene el sistema implantado en la sociedad, un sistema político y una sociedad donde los hijos tienen muchos problemas. Yo he hechado a mi hijo a la calle. Cuando se agotan las vías posibles, llega un momento en el que tienes que darle a elegir.
Una fósfora nos cuenta su experiencia: "Yo quiero dar un poco de luz a todos los padres. He trabajado en un centro de menores, pero lo que vi allí me pasó en casa. Me he divorciado de mi marido, me he mudado, todo por mi hija mayor, pero a día de hoy se ha dado cuenta, va a ser una madre maravillosa y es la mejor hija del mundo.
Para terminar hemos recibido la llamada de Alba, que ha querido dar un mensae de ánimo a las madres: "Yo con 16 años montaba a mis madres unas inreíbles. Hice cosas que no estaban bien. Mi madre supo lo que hacía por mirar mi diario. Me castigó y no pude salir de casa, ahora le agradezco todos los castigos y todo lo que tuvo que pasar por mi".
