Son datos personales de 22.000 yihadistas procedentes de 51 países facilitados a Daesh al momento de unirse en unos cuestionarios con 23 preguntas que incluyen números de teléfono, contactos de familiares, nivel de estudios, habilidades especiales o grado de conocimiento de la Sharia.
Los archivos llegaron a la cadena británica Sky News a través de una memoria USB robada en las instalaciones de la seguridad interna de Daesh por un antiguo miembro del Ejército Libre Sirio que se unió luego a los terroristas para abandonarlos también, según cuenta, desilusionado por el liderazgo de la organización y la forma en que han corrompido la ley islámica.