TRES MUERTOS EN EL SECUESTRO

Los rehenes muertos en el secuestro de Sydney son una abogada y el gerente de la cafetería asaltada

La Policía australiana defendió su intervención armada en el secuestro en un café situado en el centro financiero de Sidney. "Si no hubiera entrado habría más muertos. Han salvado vidas", dijo Andrew Scipione, comisionado de la Policía del estado de Nueva Gales del Sur. Fueron dieciseís horas de negociaciones, y al final el asalto de la policía acabó con una larga jornada de terror en Sidney. Tres personas han muerto y cuatro han resultado heridas. Entre las víctimas están dos rehenes: el gerente del local y una abogada, madre de 3 hijos. También el secuestrador un clérigo radical ya conocido por la policía.

EFE

Sidney, Australia | 16.12.2014 07:00

Los rehenes Katrina Dawson, una abogada australiana de 38 años y madre de tres niños, y su compatriota Tori Johnson, de 34 años y gerente del establecimiento asaltado, perdieron la vida en el incidente. El canal 9 de la televisión local informó de que al parecer Johnson intentó desarmar al secuestrador, identificado como Man Haron Monis o el jeque Haron, cuando éste comenzó a disparar, lo que motivó la intervención policial en la que murió el captor.

Las autoridades no han ofrecido casi detalles de lo ocurrido en el interior del local "Lindt Chocolate Cafe", ubicado en la zona financiara Martin Place. "Ellos no tenía opción", dijo el comisionado de la Policía, mientras las autoridades han abierto una investigación independiente para aclarar los sucedido que podría durar "semanas". Además de los muertos, seis personas resultaron heridas, tres de ellas por disparos, aunque no se ha especificado si las balas provenían del arma del secuestrador o por el asalto policial. Los heridos, cinco mujeres y un policía, se encuentran en situación estable después de ser atendidos en hospitales de la zona.

El llamado jeque Haron entró por la mañana en el café y secuestró a 17 personas que había en su interior, entre personal y clientes. Entre los rehenes se encontraba la empresaria brasileña Marcia Mikhael, quien durante el secuestro escribió en su página de Facebook que el secuestrador "ahora nos está amenazando con matarnos. Necesitamos ayuda ahora mismo. El hombre quiere que el mundo sepa que Australia está bajo el ataque del Estado Islámico". La Policía intervino transcurridas tras casi 17 horas de secuestro.

El secuestrador era un radical iraní que llegó a Australia en 1996 y le fue concedido asilo político. Cambió su nombre, Manteghi Bourjerdi, por el de Man Haron Monis y adoptó el título de jeque Haron. Los últimos años había protagonizado numerosas protestas contra la intervención militar de Australia en Afganistán, además de tener cuentas pendientes con la justicia por violencia y asalto sexual, entre otros cargos.