En una entrevista, Tardà ha explicado que Cataluña está protagonizando desde hace años "un gran proceso de desobediencia" y ha subrayado que si ahora "está donde está" es porque ha sido capaz de desobedecer.
"Debemos ser capaces de reconocer que tendremos que desobedecer para conseguir la independencia", ha manifestado Tardà, que ha emplazado al Gobierno a aceptar que Cataluña tiene "todo el derecho a culminar" su proceso democrático hacia la soberanía si existe el suficiente consenso en la sociedad catalana.
Ha expresado asimismo sus recelos sobre la reunión que mantendrán mañana en La Moncloa Pedro Sánchez y Quim Torra: "¿Cómo nos podemos fiar de quien ha permitido que haya presos políticos y exiliados",ha dicho.
Tardà ha hecho también autocrítica sobre la estrategia independentista, al reconocer que "la montaña era más alta de lo que parecía" y que el soberanismo dio un paso adelante en "un momento que no era el más favorable desde el punto de vista de la coyuntura internacional".
El dirigente republicano ha opinado asimismo que Cataluña hubiera vivido "un baño de sangre" si se hubiera implementado la república tras el referéndum ilegal del 1 de octubre y después de la declaración del Parlament del 27 de ese mismo mes.
"Si el 1-O, ante una población cívica e indefensa, se utilizó de forma tan chapucera y violenta por las fuerzas del orden público, qué no hubiera hecho (el Gobierno) si se hubiera decidido implementar la república proclamada en el Parlament", se ha preguntado Tardà.
Sus declaraciones van en línea con las que formuló el pasado mes de noviembre la secretaria general de ERC, Marta Rovira, quien acusó al Estado de amenazar con "muertos en la calle" si se seguía adelante con la república catalana.