Fernández, ha reconocido en Onda Cero que ha “entrado sin contar” en los galardones de Repsol, “y la verdad que lo recibimos con los brazos abiertos”, algo que sirve de reconocimiento, para darse a conocer, atraer clientes y crecer.
Casi un centenar de restaurantes (96) con sus chefs a la cabeza, han logrado entrar en la prestigiosa categoría de Soles Repsol en el año 2021, Bajo el lema “Nuestras cocinas no se apagan”, 3 con Tres Soles, 11 con Dos Soles y los 82 con un Sol.
La distinción al Ferpel, lo hacen entre otros por respetar el mundo rural, el mar y sus medios de vida, la apuesta por pequeños productores y por mostrar su grandeza cuando dota de valor gastronómico a aquello que en ocasiones se desprecia por no tenerlo económico, caso del muil y la gallina vieja.
La recuperación de recetas olvidadas es otro estímulo para una suerte de cocina sumamente respetuosa, sabrosa y sencilla, no exenta de elaboración. Añaden que extrae el máximo partido al ingrediente principal, el acompañamiento carece de artificio y el conjunto se disfruta en una casa con distintos espacios y vistas al mar.
Lleva dentro de los fogones desde los 7 años cuando ya ayudaba a sus padres en el restaurante que tenían, y los últimos 14 al frente del Ferpel “somos los mayores defensores del medio rural, creemos que el futuro esta en los pueblos, en forma de vida como se hacia antiguamente”. De ahí que apoyen a los pequeños productores del entorno para tratar de generar esa vida en los pueblos.
La cocina tradicional esta en la base de sus creaciones culinarias, al seguir conservándose mediante guisos, los fondos, el producto “y eso es lo que hace crecer a los restaurantes”, es partidario de que la cocina de antes se tenga que recuperar al ser la valedora de las recetas actuales.
Un total 53 inspectores de Guía Repsol han conseguido realizar todas las visitas previstas en todo el territorio nacional, a pesar de las extraordinarias condiciones vividas durante el pasado año, algo que paso desapercibido al distinguido, aprovechando para felicitar a los organizadores, al no enterarse cuando estuvieron en Coaña.
