Las Bodas de Isabel de Segura han atraído a Teruel a cerca de cien mil personas este fin de semana para revivir la historia de los Amantes.
La escena del funeral, la Oda a los Amantes y el beso multitudinario en la Plaza del Seminario ponían ayer el broche de oro a la vigésimo octava edición de la recreación medieval, con la vista puesta ya en la declaración de fiesta de interés turístico internacional.
Desde la Fundación Bodas de Isabel se plantean seguir mejorando los aspectos técnicos de cara a próximas ediciones, con una buena planificación y una infraestructura bien definida y permanente, que no suponga molestias para los vecinos.