"Me siento frustrado por no estar cubriendo las expectativas que el club puso sobre mí", ha indicado el ya exentrenador azulgrana, quien ha pedido disculpas a la afición y a la organización.
"No quiero perjudicar más al club ni a los jugadores y prefiero dejar el equipo a otra persona que pueda ayudar a salir de esta situación de tristeza que tiene el grupo", ha explicado Prigioni en su despedida.
"Me duele mucho dejar así el club, me siento mal y responsable", ha añadido el de Río Tercero que no ha querido justificar las derrotas por los lesionados y el calendario.