Código Bibiana

Bibiana Fernández reflexiona en este 'Código Bibiana' sobre el temporal de nieve: "Durante tres o cuatro días los niños y padres fueron felices, se nos olvidó por un momento la pandemia que ahora nos está devorando". Dice que prefiere quedarse con las cosas buenas.

Bibiana Fernández cuenta en este ‘Código Bibiana’ que terminó su Nochebuena ayer por la noche y que no cogió el teléfono porque "no estaba en condiciones". Tras haber pasado unas fiestas sin ver la televisión ha decidido que "quiere entrar en el nuevo año tranquila".

Bibiana Fernández cuenta en este ‘Código Bibiana’ que esta mañana se ha quedado dormida y que gracias a la llamada de Jaime Novo ha podido llegar a tiempo al programa de hoy. Además, la colaboradora dice que los besos "no se pueden medir", ya que "tienen que ser a tempo".

Bibiana Fernández habla en este 'Código Bibiana' de la amistad. Dice que "todo el mundo sabe diferenciar a un allegado de un amigo y que todo el mundo tiene que ser responsable de cara a las fiestas navideñas". Además, confiesa que es adicta a los polvorones y al anís.

Bibiana Fernández dice en este ‘Código Bibiana’ que tiene días que está "lacia", pero que lo que le quita estar así es estar "en la radio o sobre un escenario". También dice que hay ciertas relaciones en las que "el espacio es necesario". Aunque ella reconoce que "necesita de la presencia de vivirlo", porque la vida es "compartir".

Bibiana Fernández cuenta en este ‘Código Bibiana’ que anoche, nada más llegar a su casa, el chófer llamó a su puerta para avisarle de que se había dejado el teléfono en el teatro. También Bibiana hace un ejercicio de memoria y recuerda que hace 30 años estaba en la fiesta de Madonna, "una diva", y después se fue a otra donde se encontró a la "diva del flamenco" Isabel Pantoja.

Bibiana Fernández cuenta en este ‘Código Bibiana’ que ella se hizo en el cine: "En el cine vivía esas aventuras que quería vivir en la vida real, fue un refugio donde aprendí muchas cosas". Además, Bibiana dice que ahí también encontró a muchos referentes que en ese momento no los conocía, pero que "marcaron su vida".

Bibiana Fernández dedica este ‘Código Bibiana’ a que sobre ella nunca ha mandado nadie, a excepción de su coche que "es una maldición". Además cuenta que a ella el futuro "no le gusta" porque "ya no hablas con personas".

Bibiana Fernández cuenta en ‘Código Bibiana’ que un día tuvo problemas con su coche y se quedó tirada en una gasolinera con su perrita. Bibiana nos dice que cuando ya estás una vez en casa después de estas situaciones llegas con tanta adrenalina que no puedes dormir.

Bibiana Fernández dedica este ‘Código Bibiana’ a las autobiografías, que dice que estas solo tienen sentido “si son de verdad”. Cuenta que su infancia le hizo ser feliz a pesar de las circunstancias que tuvo que vivir. Describe su vida como “una vida llena de luces y sombras”, pero en la que siempre se ha sentido “muy querida”.