Batman o el reflejo oscuro de la realidad

Dicen que es el Batman más oscuro y violento que hemos visto jamás en una pantalla de cine. El viernes se estrenó la última película del famoso superhéroe: 'The Batman'. Una película dirigida por Matt Reves y protagonizada por Robert Pattinson, que se pone el traje de un Batman oscuro y violento en unos tiempos oscuros y violentos. Y es que Andrés Moraleda cree que cada época tiene su reflejo en un Batman y lo demuestra en Fuera de Guion de Por fin no es lunes.

Batman es el reflejo (casi siempre) oscuro de la realidad, y ese ‘casi siempre’ es porque los primeros Batman eran de todo, menos oscuros. El de Adam West de los años 60 era un delirio pop y bailongo. Muy hippie, como esos años. Por eso quizás chocó tanto el Batman de Tim Burton de principios de los 90, un ejercicio estético gótico, sin muchas pretensiones argumentales, pero eso también era muy de la época.

Pero el Batman más político, el verdadero reflejo oscuro de la realidad es el de Christopher Nolan. La primera entrega de Nolan es ‘Batman Begins’, que se estrena en el año 2005, en plena psicosis por el terrorismo islámico. ¿Y a quién se enfrenta Batman en esta película? A la Liga de las Sombras, un grupo de fanáticos que viven en una montaña tibetana y quieren acabar con la sociedad occidental decadente. Batman le declara la guerra al terror, como una especie de George Bush de la noche al que no le importan los medios para conseguir su fin. Medios como la hipervigilancia tecnológica, una de las herencias que nos dejó aquella ‘guerra contra el terror’ y que se convierte en la mejor arma de Batman para acabar con ese terrorista anarquista llamado Joker en ‘El caballero oscuro’.

En busca de un Batman para esta época

‘El caballero oscuro’ se estrenó en 2008, ¿y qué pasó ese año? Pues que llegó la crisis económica y el hartazgo de la sociedad contra las clases dirigentes. Un hartazgo al que se enfrentó Batman en la siguiente película de la saga, ‘El caballero oscuro: la leyenda renace’ que se estrenó en 2012. En esa película Batman se enfrenta a Bane, que alentaba a la revolución de las masas en Gotham City, pero que bien podría hacerlo a las puestas de Wall Street, en plena Primavera Árabe, o en un ‘Rodea el Congreso’.

En realidad, Batman no es tanto el reflejo oscuro de la realidad como lo son sus villanos. Batman es el estado que se enfrenta a esa realidad. A veces más fascista (como en los cómics de Frank Miller), a veces más liberal… Pero siempre con unos métodos cuestionables y de una manera individualista. Por eso, el Batman de Matt Reves es muy de nuestra época, pero quizás, con el panorama que tenemos, necesitemos a otro Batman, uno más conciliador, menos Batman, como el que interpretó Ben Affleck en ‘La liga de la justicia’.