Se cumplen dos años de aquella foto en el balcón de Ferraz, donde se podía ver a Begoña Gómez, a Santos Cerdán y a Montero y a Sánchez.

Dos años desde aquella noche del 23 de junio de 2023 cuando Pedro Sánchez, aún perdiendo las elecciones, dijo aquello de "somos más y así seguirá siendo". Dos años desde aquella foto en el balcón de la sede del PSOE en Ferraz donde se podía ver en la imagen en este orden: a Begoña Gómez, imputada por corrupción en los negocios, apropiación indebida y trafico de influencias; a Santos Cerdán, actualmente en prisión por organización criminal y cohecho, y a María Jesús Montero y Pedro Sánchez manteniendo y lidiando con los casos de corrupción que asfixian al PSOE.

Dos años desde el 23J y donde se ha destapado el caso Begoña, el caso del Fiscal General del Estado, el caso del hermano de Pedro Sánchez y el caso Ábalos-Cerdán-Koldo que avanza en el Tribunal Supremo.

Pero dos años donde la minoría parlamentaria del PSOE está haciendo que la legislatura sea prácticamente ingobernable. Sus socios comienzan a desmarcarse en numerosas votaciones. El hecho de que Sánchez necesite en el Congreso el apoyo de todos, todo el tiempo y al mismo tiempo, ha supuesto por ejemplo que no se hayan podido aprobar ningún año los Presupuestos Generales del Estado. Ni los de 2024, ni los de 2025 y por el mismo camino van los de 2026.

Todo ello, en dos años de legislatura donde la dependencia de Puigdemont fue patente desde el primer día. Exigencias a cambio de investidura: primero con la amnistía, luego con la inmigración y finalmente con la financiación singular para Cataluña. Un apoyo de Puigdemont a la investidura de Sánchez que precisamente fue negociado por el que era mano derecha del presidente del Gobierno en el partido y para negociaciones con Puigdemont y Otegi: Santos Cerdán, actualmente la prisión de Soto del Real.