Los albinegros se miden este sábado como locales al filial blaugrana (Castalia, 17h). Tras dos derrotas consecutivas y con la obligatoriedad de abandonar la zona baja de la tabla clasificatoria, el equipo entrando por Sergi Escobar sabe que no le vale otro resultado que no sea la victoria. Y para ello el aliento de un graderío entregado con su equipo puede ser fundamental.
Finalmente serán cerca de 8 mil espectadores los que pueblen el graderío albinegro. La mejor entrada desde que se decretara la situación de pandemia que paralizó el mundo del fútbol. Un periodo que , desgraciadamente, ha impedido disfrutar a la parroquia albinegra de la estancia de su equipo en la Segunda y que, por suerte, comienza a quedar atrás
"Sabemos del "efecto Castalia" y que puede entrar ya mucha gente. El ambiente será mejor y eso es un punto a favor. Debe ser un fortín, la idea es hacernos fuertes en casa, somos el equipo con más masa social y se debe notar" aseguraba el técnico almazorense antes de enfrentarse a un rival que augura "complicado por su calidad" como es el Barça B.
