Adriana Sanz nos enseña que vivir más despacio es vivir mejor: menos estrés y más salud
Reducir el ritmo de vida ayuda a disminuir el cortisol, la hormona del estrés. Vivir más despacio mejora el sueño, fortalece el sistema inmunológico y favorece la salud mental. Incorporar pausas, desconexión digital y respiración consciente puede transformar nuestro bienestar. A veces, lo mejor que podemos hacer es parar.