La brilllante victoria de ayer ante el Levante, a pesar de las numerosas e importantes ausencias puede o debe significar un punto de inflexión esta temporada para el Barcelona. El equipo terminó jugando con muchos de los jóvenes valores de la cantera que además acabaron tirando del carro y casi nadie echó en falta a los muchos e importantes lesionados.
Podrán decir que era el Levante y tienen razón pero el Barcelona hizo un partido muy serio, generó muchas oportunidades y mereció una goleada consistente ante un rival que siempre estuvo a merced de los blaugranas.
Capítulo aparte merece el sevillano Gavi, Gavi es un jugador diferencial. Especial, con un don que solo tienen algunos futbolistas elegidos. Cada vez que toca el balón Elige la mejor opción, no se arruga y demuestra un desparpajo impropio de un jugador de diecisiete años. Posiblemente estamos ante otro jugador que puede marcar una época importante en el Barcelona. Tiene una gran personalidad y da la sensación de que lleva jugando aquí mucho más tiempo que el que de verdad ha estado en el primer equipo. De por sí ya es una de las mejores noticias de la temporada, si se consolida el Barcelona tiene en Gavi un talento,para muchísimos años.
Y luego está el regreso de Ansu, mágico , especial, único, necesario. Es el guión perfecto para una vuelta tras más de diez meses de baja. Ni lo más optimistas podrían imaginar. Ansu es el futuro. Es nuevo diez del Barcelona refleja y representa la ilusión que tanto anhela y necesita el barcelonismo. Llevaba mucho tiempo sin jugar y era complicado su regreso pero tan solo diez minutos después de regresar al terreno de juego bastaron para demostrar que es capaz de generar unas expectativas inimaginables para muchos.
Puede ser que este partido ante el Levante, a pesar de las ausencias, tras semanas convulsas y resultados adversos sea el punto de inflexión que necesitaba el Barcelona para relanzar la temporada. Ojalá no sea un espejismo. El mejor Barcelona de la temporada, el que mejor fútbol ha practicado estaba formado por casi ocho canteranos. Ese es el camino. A partir de ahora, sobre esa base solo se puede crecer. No hay mucho que perder. Este ha sido el éxito tiempo atrás y ayer se volvía a demostrar que si, también se puede disfrutar y competir. Lo dicho, un punto de inflexión.
