Lo vivido ayer en Sao Paulo en el desenlace del partido Brasil- Argentina pasa a los anales de la historia del mundo del fútbol como uno de los espectáculos más esperpénticos del mundo del deporte y eso que en los últimos tiempos estamos acostumbrados a vivir escenas auténticamente surrealistas en muchas partes del mundo.
Es inconcebible que en sudamericana se produzcan un día sí y otro también escenas como la de ayer que dañan y mucho la imagen de sus dirigentes deportivos y políticos.
Es cierto que en el cono sur se está viviendo una situación complicada , agravada por el tema COVID , pero deben ser precisamente los dirigentes los que pongan calma y mesura y no sean los que echan especialmente gasolina al fuego, con el resultado que pudimos comprobar.
Ayer en Brasil subyace , evidentemente la eterna enemistad entre los dos países, y por supuesto alentando por la reciente y dolorosa derrota como local de la canarinha frente a la albiceleste en la última final de la Copa America.
Uno puede pensar que Argentina forzó al maximo y que no debieron viajar los cuatro jugadores que venían de la Premier , a pesar de la existencia de un pasillo sanitario para los futbolistas en estos torneos, pero realmente era necesaria la imagen que se ofreció al mundo entero con los fiscales entrando al campo en pleno partido? No pudo haberse cortado antes y evitar el escarnio mundial que las imágenes que dieron la vuelta al mundo y lo reflejaron claramente?
La desgracia es que el mal ya está hecho y los dirigentes Políticos y deportivos del cono sur tienen en la actualidad su imagen muy tocada. Recuerdo personalmente muchas imágenes inaceptables e indignas del mundo del deporte , pero desde luego la de ayer pasa a la galería de mis recuerdos de hechos más desafortunados en un recinto de juego, y lo que es peor , creo que nuestra capacidad de sorpresa cada vez es menor, y nos vamos acostumbrando más a imágenes tan surrealistas.
Por cierto, semana de selección y oxigeno para el equipo de Luis Enrique, con mucha gente de refresco venció con claridad y recupera el pulso para el desafío final que le viene de aquí a Noviembre, el más difícil todavía de evitar la repesca y remontarle a los suecos la diferencia de puntos que nos sacan. En fin, Confiemos.
