En el año 2004, Guillem Jiménez se convirtió en el primer actor con Síndrome de Down que protagonizó una película española. Aquella cinta de Xavier Bermúdez, 'León y Olvido', que contaba la relación entre dos hermanos -ella era la actriz Marta Larralde- consiguió el reconocimiento de festivales como Málaga o Karlovy Vary, y abrió el camino a películas como 'Yo también', con Pablo Pineda al frente, que brillaría en los Goya un año después. Antes de la pandemia, el director volvió a reunir a la pareja protagonista para proponerles un regreso a aquella historia, para rodar 'Olvido y León', para explorar qué habría pasado con esa relación de hermanos 15 años después.
Esa continuación de la historia es la que llega a los cines el próximo 26 de marzo, y ha coincidido fatalmente con la desaparición de Guillem Jiménez, que falleció el último fin de semana de febrero de 2021. Como recordaba el diario ourensano La Región, Jiménez había rodado allí la secuela, que se estrenó en el Festival de Cine Internacional de Ourense. Esta mañana, en los Cines Embajadores de Madrid, Marta Larralde atendía a la prensa para presentar la película, y lo hacía visiblemente emocionada: tanto en el photocall como en sus charlas con los periodistas, las lágrimas acudían a sus ojos cada vez que recordaba a su compañero de reparto.
"Guille y yo siempre fuimos un poco como hermanos", decía Larralde en conversación con Kinótico, con la voz quebrada. "En aquella película, 'León y Olvido', nada más vernos... hubo una química muy especial entre nosotros, y siempre decíamos que nada más conocernos ya fuimos hermanos. Y a lo largo de todos estos años no perdimos el contacto. Él venía a mi casa y yo iba a la suya, lo veía a él y a su familia. Más que en compañeros de trabajo... nos convertimos en familia. Él siempre decía que le gustaría volver a trabajar, y sé que parte de que hiciéramos 'Olvido y León', y de que Xavier se pusiera a escribir, fue por la insistencia de Guille. Es el culpable de que hiciéramos 'Olvido y León', fue él".
"Estoy muy triste y muy feliz también, porque para él esto era la emoción de su vida. Hacer la primera peli fue... ¡imagínate! Su familia luchó muchísimo por él, y todos los retos que se propuso en la vida los consiguió. Este fue uno más. Es muy bonito que lo haya podido ver y que se haya completado este círculo", relataba la actriz, entre lágrimas. "Esto es un homenaje a su vida, que fue maravillosa. Él tenía la peculiaridad de tener un cromosoma de más, pero era una persona como todas, con sus sueños, con sus necesidades de amor y de sexo, de cariño, y con sus sueños por cumplir. Es un homenaje a él, que consiguió su sueño: hacer una película. ¡Y dos!".
