En estas fechas tan entrañables a todos nos gusta viajar e irnos de vacaciones. Hay quien cuenta los días y los tacha en el calendario hasta llegar al momento soñado en el que puede desconectar y muchos asocian esa idea con viajar a otros lugares.
Pero claro, hay otras muchas otras personas que piensan en el mismo lugar, lo que provoca atascos y atascos de turistas, de visitantes, de paseantes...
Teniendo en cuenta que gran parte de la población libra casi al mismo tiempo, la pregunta sería ¿dónde metemos a tanta gente? Habrán visto centros de ciudades saturados, con aglomeraciones en grandes monumentos y, sobre todo en fechas señaladas, casi no se puede andar por las calles.
El turismo se ha masificado, en muchos lugares hay una sobrecarga de personas, algo que resulta incómodo tanto para el que visita como para el vecino que intenta hacer su vida normal. Y es por todo esto que ha llegado el momento de pensar en soluciones.