El síndrome del acento extranjero es una patología poco frecuente pero muy llamativa. Hay unos 100 casosdocumentados en el mundo. Es un trastorno del habla que se caracteriza porque aquellas personas que lo sufren hablan su propia lengua, pero con un acento diferente.
Hay casos registrados como el de una española de mediana edad que hace unos años comenzó a hablar su lengua materna, el castellano, como si fuera una extranjera. Se la entendía perfectamente, pero sonaba con un acento extranjero. Cada uno lo percibía de una manera: algunos decían que parecía francesa, otros inglesa, alemana o magrebí. Ella no podía evitarlo. Voluntariamente no podía volver a hablar el castellano sin acento. Esto es común a todos los pacientes del síndrome del acento extranjero.
Y esto es una de las cosas que pueden desestabilizar más emocionalmente a los pacientes. Les hace perder parte de su identidad y notan además cómo la gente les trata como extranjeros sin que lo sean. Y esto termina siendo un tormento. Aunque también hay pacientes que se lo toman bastante bien. Es el caso de una mujer canadiense que empezó a hablar con acento escocés. Y ella se lo tomó como un reinicio, un reseteo. Y se ilusionó mucho con investigar la historia de sus antepasados escoceses.
¿Cuáles son sus causas?
El desencadenante del síndrome del acento extranjero son las lesiones cerebrales, un cúmulo de pequeñas lesiones en distintos puntos de la corteza cerebral. Pueden producirlas ictus, hemorragias intracraneales, tumores cerebrales o incluso hay algún caso por esclerosis múltiple.
También se producen alteraciones en el control de los movimientos del aparato fonador. Esto es lo que provoca el cambio definitivo en la pronunciación.
¿Se cura?
Cuando el cerebro recupera la funcionalidad de la zona afectada todo vuelve a la normalidad. Esto puede ser en unos días, semanas o años. Hay pacientes que necesitan rehabilitación y reaprender a hablar con su acento natal.
¿Qué son las morning glory?
La morning glory o "Gloria de la mañana" es una especie de planta de la familia de las convolvuláceas. Es usada como planta ornamental por la belleza de sus flores que nacen con el sol cada día para morir al atardecer. Repiten el mismo ciclo durante su vida reproductiva renovando a diario su floración.
