Rubén Amón indulta a la televisión pública noruega, pues, a pesar de que no pasa nada, su audiencia se dispara con contenidos lentos, sin realización ni montaje. Ocho horas viendo la captura del salmón, un viaje en tren o señoras haciendo punto en prime time son un éxito entre los vecinos del país nórdico.
Rubén Amón indulta a la exitosa TV pública noruega en la que no pasa nada
Rubén Amón indulta a la televisión pública noruega, pues, a pesar de que no pasa nada, su audiencia se dispara con contenidos lentos, sin realización ni montaje. Ocho horas viendo la captura del salmón, un viaje en tren o señoras haciendo punto en prime time son un éxito entre los vecinos del país nórdico.