Ángeles Caballero explica que se levantó una mañana y ya no era ella, era "Anomaly" porque al despertarse, Twitter le avisó de que había un señor en Malasia que había decidido apropiarse de tu cuenta.
Comenta, que aunque no tuviese nada relevante que esconder, le incomodaba que hubiese un desconocido que tuviese acceso al tuit de con la foto de sus hijos y sus mensajes privados.
Aunque recuerda que el ladrón optó por el cachondeo y al principio e hizo algunos retuits nada relevantes. La cosa cambió de tono cuando ella se dio de alta con su antiguo usuario y anunció que había sido hackeada bajo el nombre de @anomalylaflare7. Entonces el hacker lo retuiteó y pidió que nadie la molestara. Más tarde pidió que se pusiera en contacto por privado y al día siguiente el hacker amenazó con publicar su contraseña y aprovechó para mostrar su decepción con ella: "Ella es mala y toma el control".
Afortunadamente, y tras la pertinente denuncia en la policía, Ángeles Caballero recuperó la cuenta y obviamente ha cambiado todas las contraseñas, puesto todos los filtros de seguridad y quitado la foto de los niños.
